El temor de Rockatmellio era, en sus sueños fantasiosos, llegar a tener una banda y tener que presentarse en vivo en algún programa de televisión con playback, como solía pasar con la mayoría de bandas que nadie los conoce y tienen apenas sus pocos minutos de gracia y de fama. Eso no sentaba nada bien. Había un programa que sí emitía en vivo y se preocupaban del sonido en directo, pero por un escándalo relacionado con drogas y una situación incómoda para el que conducía, desapareció el único respiro que sobrevivía en la parrilla de programas televisivos de señal abierta.
La buena música ha sido desplazada hacia el cable satelital y para canales extranjeros que pasan la transmisión de megaconciertos de reconocidas bandas. A nivel local, había que soportar el pésimo gusto musical agropecuario de los vecinos de mierda, que por cualquier excusa había que soportar su música de mierda, hasta las tres o cuatro de la mañana, sin intervención o ayuda del serenazgo porque en esas lides no se meten. Mucha música de mierda, de esas que terminas odiándola de por vida. Por eso terminas hasta el hartazgo oyendo las anuladas estaciones de radio de la banda FM. Ni hablar de la AM, donde más que música agropecuaria, era un conglomerado de emisoras pastorales 24/7, música vernacular gracias a las estaciones piratas que irrumpían sin licencia e intentos de emisoras de radionoticias jalado de los pelos que de seguro nadie escuchaba.
* Photo by Chris Liverani on Unsplash